• Las ciruelas, en especial la ciruela pasa o seca, son ideales para combatir estreñimiento y otros trastornos intestinales como divertículos.
• Ayudan a reducir el colesterol de la sangre.
• Contienen gran cantidad de potasio, lo que contribuye a eliminar líquidos corporales, evitando la molesta retención de líquidos.
• Protege contra problemas cardiovasculares.
• La ausencia de grasa, su gran riqueza en ácidos grasos y elevado contenido en potasio resulta muy importante para el tratamiento de la hipertensión arterial.
• Es rica en fibra, fósforo, hierro, sodio, magnesio, agua, calcio, cobre, cinc, selenio, vitaminas A, C, B1, B2 y Niacina.
• El jugo de ciruela fresco es ideal para aliviar el estómago de empachos y mala digestión.
• Tienen un efecto positivo en las concentraciones de ácidos biliares, lo que previene el cáncer de colon.
• Contienen cobre que reduce el riesgo de formación de coágulos en la sangre.
• Contienen boro, mineral que ayuda a las mujeres menopáusicas a retener estrógenos, hormona indispensable para la adecuada absorción del calcio.
CIRUELAS FRESCAS: poseen muy poca grasa, son ricas en vitamina C y A, y tienen un gran poder calórico. Su jugo es ideal para depurar el organismo, limpiar el hígado, los riñones, los intestinos y el efecto llega a notarse hasta la piel, pues recordemos que intestinos y organismo limpio es sinónimo de piel sana. ES rica en antioxidantes, asi que es rejuvenecedora y ayuda al desgaste prematuro de la piel.
CIRUELAS PASAS: contiene más azúcar y esto pudiera favorecer los gases intestinales y la flatulencia. Sin embargo, la ciruela pasa es excelente para los intestinos y muy nutritiva. Se recomienda a los atletas y personas que realizan trabajos físicos pesados, asi como a los estudiantes, pues les da gran energía. Las ciruelas pasas tienen más propiedades nutritivas que las frescas, porque al perder humedad las ciruelas concentran sus propiedades y elementos naturales
